El pasado 15 de septiembre de 2025, la localidad de Ainzón acogió la XXXV Fiesta de la Vendimia de la DOP Campo de Borja, un evento cargado de tradición, orgullo y simbolismo en torno a la Garnacha, seña de identidad de la comarca.
La cita reunió a más de 150 invitados, entre autoridades, representantes del sector vitivinícola, vecinos y amantes del vino, consolidándose como un homenaje a generaciones de viticultores y bodegas que han hecho de la Garnacha un referente internacional.
Programa de la jornada
La celebración dio comienzo con la recepción oficial de autoridades e invitados en la Plaza Mayor de Ainzón, donde tuvo lugar la imposición de la banda a la Reina de la Vendimia, uno de los actos más representativos y emotivos de la fiesta.
Seguidamente, se celebró la tradicional misa baturra en la Iglesia Parroquial Nuestra Señora de la Piedad, acompañada por la música y el folclore del grupo de jota Fuendejalón, que aportó carácter popular y festivo al encuentro.
El momento central llegó en el Polideportivo Municipal de Ainzón con la exaltación del vino y el simbólico pisado de las uvas. Con la extracción del primer mosto del año se dio la bienvenida oficial a una nueva cosecha, marcando el inicio del proceso de elaboración de los vinos de la DOP Campo de Borja.
Las autoridades cerraron el acto con un brindis por la Garnacha, gesto que simbolizó la unión de tradición, esfuerzo y futuro, y que celebró el orgullo de un territorio comprometido con su tierra y sus vinos.
Una cosecha con retos
Eduardo Ibáñez, presidente de la DOP Campo de Borja, anunció que la cosecha será inferior a la prevista inicialmente, una circunstancia que refleja los desafíos a los que se enfrenta el sector vitivinícola. Sin embargo, este hecho también puso en valor la fortaleza, resiliencia e innovación de bodegas y viticultores, que afrontan el futuro con ilusión y respeto por sus raíces.
La Fiesta de la Vendimia volvió a ser mucho más que un evento cultural: fue un punto de encuentro para reafirmar la identidad vitivinícola del Campo de Borja y rendir homenaje a quienes, con dedicación y esfuerzo, mantienen viva la esencia de la Garnacha.